martes, 18 de diciembre de 2012

La maldición de Tutankamón

En un telegrama enviado el 6 de noviembre de 1922, Howard Carter apremiaba a Lord Carnarvon, el acaudalado millonario (aunque a la postre no tanto) que financiaba las excavaciones en el Valle de los Reyes, para que acudiera inmediatamente a Egipto si, como era de esperar, quería estar presente en la apertura de la tumba de Tutankamón:
«Al final hemos hecho maravilloso descubrimiento en el Valle STOP Una magnífica tumba con los sellos intactos STOP Recuperaré algo para su llegada STOP Felicidades FIN».

El blog Hislibris.com publica un extenso e interesante comentario sobre "La maldición de Tutankamón", libro publicado por Joyce Tyldesley, arqueóloga y egiptóloga británica.

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